UDI resta apoyos proyecto del gobierno para remover a altos mandos de las FF.AA.
Cuando llevaba menos de cinco minutos en el estudio del matinal Bienvenidos, de Canal 13, el Presidente Sebastián Piñera sorprendió este miércoles diciendo: “Les voy a dar una primicia”.
A continuación, y mientras abordaban la decisión que el propio Mandatario había tomado el jueves pasado de pedir la renuncia del ahora destituido general director de Carabineros Hermes Soto -lo que gatilló una situación inédita en el país-Piñera expresó: “Vamos a enviar una reforma constitucional para terminar con ese mecanismo. Los comandantes en jefe de las Fuerzas Armadas y el general director de Carabineros tienen que estar subordinados al poder civil, y cuando el Presidente les pide la renuncia, tienen que renunciar en el acto”.
Con sus palabras, el Jefe de Estado transparentaba su decisión de modificar una norma establecida en 2005 en la Constitución, que había reemplazado la inamovilidad de los altos mandos uniformados y dispuso que, para su remoción, el Mandatario debe informar a ambas cámaras del Congreso y enviar un decreto fundado a la Contraloría.
Paradójicamente, la norma de 2005 había sido promovida por los entonces senadores y actuales ministros Andrés Chadwick (Interior), Alberto Espina (Defensa) y Hernán Larraín (Justicia).
Así, consultado si hay una lección aprendida, Chadwick respondió que “las lecciones se aprenden y es importante no cerrar los ojos y siempre escuchar y aprender de la experiencia de cuando se gobierna”.
Previniendo que no se conocen aún detalles de la iniciativa, desde la UDI tomaron distancia de la reforma. La presidenta de ese partido, Jacqueline van Rysselberghe, puntualizó que “los comandantes en jefe no pueden quedar al arbitrio de las mayorías políticas circunstanciales de un gobierno, y ese es el sentido último de la solicitud de un decreto fundado”. De esta manera, añadió que “si el proyecto que quiere mandar el Presidente mantiene ese principio, yo estaría de acuerdo, si no se mantiene, habría que pensarlo muy bien”. La senadora sostuvo, en ese sentido, que “es conveniente resguardar la autonomía de las Fuerzas Armadas”.
El senador UDI Juan Antonio Coloma, en tanto, calificó como “razonable” el procedimiento actual. Aunque afirmó que el tema “es más que debatible”, precisó que “obviamente, remover a un comandante en jefe tiene que ser, desde mi perspectiva, un tema que merece un esquema institucional un poquito más completo”.
Respaldo a la decisión
Desde los demás partidos de Chile Vamos, la decisión de Piñera fue ampliamente compartida.
El timonel de RN, Mario Desbordes, destacó que lo ocurrido con el general (R) Soto demostró que “si bien el Presidente no tiene que pedir permiso, el informar a un poder del Estado que no tiene ninguna posibilidad de opinar me parece que ya lo transforma en algo innecesario”. Además, recalcó que “los presidentes de ambas cámaras estuvieron a la altura” y permitieron un trámite expedito, pero advirtió que eso podría haberse dificultado y que, en la práctica, podrían haber trabado la decisión de remover al general.
Desde Evópoli, su presidente, Hernán Larraín Matte, dijo que “el principio que debe sentarse es seguir profundizando la autoridad civil y presidencial respecto de las FF.AA. y de Orden”.
En la misma línea, el secretario general del PRI, Rodrigo Caramori, explicó que “nuestra democracia, ya más sólida, robusta y firme, debe dar paso a la consolidación del poder y la subordinación que deben tener las FF.AA. y de Orden hacia la figura presidencial”.
Según comentaron este miércoles en La Moneda, el anuncio presidencial será materializado a través de un proyecto de ley que está siendo trabajado por Interior y Segpres, iniciativa que podría ser ingresado en enero al Congreso.
La idea contaría también con respaldos en la oposición. De hecho, el diputado PS Leonardo Soto anunció la semana pasada que su bancada ingresaría un proyecto en el mismo sentido, es decir, otorgando mayores facultades al Presidente en estos casos.