Quintana destaca aprobación de retroactividad de la Ley de imprescriptibilidad de delitos sexuales contra menores
Esta semana, la Comisión de Constitución de la Cámara de Diputados aprobó el proyecto de ley sobre imprescriptibilidad de delitos sexuales cometidos contra menores de edad, con una indicación que permitirá que la ley rija retroactivamente desde el 27 de septiembre de 1990.
En ese sentido, el senador de La Araucanía y presidente del Senado, Jaime Quintana, quien es el autor del proyecto de ley, destacó la aprobación de la indicación en la comisión de la Cámara, asegurando que “las víctimas de estos delitos normalmente no están en condiciones de iniciar un proceso penal cuando los hechos ocurren durante su infancia o incluso al cumplir los 18 años, sino que ello comúnmente tiene lugar cuando alcanzan los 45 años”.
En la misma línea, Quintana agregó que “el adulto que ocupa una posición de poder frente a un niño o niña, logrando traspasar sus tenues defensas, es capaz de establecer un vínculo abusivo generador de múltiples ultrajes causando un daño tan devastador, que le impide hacer frente a su abusador hasta que haya transcurrido mucho tiempo. Por lo tanto, valoramos de gran manera la aprobación de la retroactividad”.
Por otra parte, el parlamentario de La Araucanía agradeció la tramitación del proyecto que ley de su autoría, manifestando que “estas son las formas de llegar a acuerdos, de cara a la ciudadanía; múltiples agrupaciones han acompañado este largo debate, (…) cuando presenté este proyecto hace 9 años atrás, con el apoyo de los senadores Patricio Walker, Ximena Rincón y Fulvio Rossi, era otro Chile, y no había mucha esperanza en que un proyecto de estos pudiera ver la luz porque teníamos una fuerte resistencia del mundo de la academia, del derecho penal y del mundo político. Sin embargo, hoy día es distinto”.
Actualmente, los únicos delitos que no prescriben son los de lesa humanidad, por lo que, de aprobarse este proyecto constituiría un hecho inédito en Chile y de gran relevancia jurídica. Diversas legislaciones han comenzado a abrirse a la imprescriptibilidad. Los casos de Escocia, Canadá, particularmente Ontario, de diversos estados en Estados Unidos, Oaxaca y Nuevo León en México o Suiza constituyen claros ejemplos de ello. En Argentina, sin ir más lejos, el año 2011 se modificó la legislación y se estableció la ley de respeto al tiempo de las víctimas. Algo similar ocurrió en Ecuador, donde se efectuó una consulta popular en orden a modificar la Constitución y que nunca prescriban los delitos sexuales en contra de niños y adolescentes.