Indap cuenta pública 2019: Gestión ante la sequía, modernización y nuevos mercados para la pequeña agricultura

Acciones para enfrentar los efectos de la crisis hídrica en la agricultura familiar campesina, búsqueda de nuevas vías para la comercialización de sus productos y modernización de programas eje para la atención a este sector, marcaron el trabajo de INDAP el último año y son prioridades en 2020, junto a la emergencia por el Covid-19,  de acuerdo a la Cuenta Pública 2019 de este servicio del Ministerio de Agricultura, entregada desde Río Bueno (Los Ríos), por su director nacional Carlos Recondo.

Un total de 164.896 personas pertenecientes a la pequeña agricultura de todo Chile, de las cuales 74 mil son mujeres, 54 mil pertenece a pueblos indígenas y 13 mil son jóvenes menores de 31 años, fueron atendidas con asesoría técnica, capacitaciones, créditos y otros instrumentos financieros, en 2019.

Con un presupuesto anual que llegó a $302.460.396 (incluidos los $14.222.529 apalancados desde los gobiernos regionales), y una ejecución de $299.086.655 (98,88% del total), los recursos invertidos en estos usuarios fueron $245.171 millones (81%). Los restantes $55.876 millones (19%) fueron utilizados para la operación y el soporte institucional.

Sequía, emergencias y cambio climático

“El año pasado fue uno de los más duros para la pequeña agricultura, fuimos azotados por la sequía más grande de nuestra historia”, describe Recondo para introducir al tema que más preocupó a INDAP en 2019 y que obligó actuar de urgencia en apoyo de los productores, especialmente en las 7 regiones con declaración de emergencia agrícola.

Este 2020 la ejecución del presupuesto estará focalizada en las regiones con sequía y en decretos vigentes de emergencia y/o escasez hídrica, y la apuesta a largo plazo es insistir con mayores prácticas de sustentabilidad y la promoción de prácticas de adaptación al cambio climático.

La inversión en el Programa de Riego fue de más de $15.000 millones con lo que se mejoró la gestión del agua en 13.495 hectáreas beneficiando a 5.200 pequeños agricultores, de los cuales 799 accedieron al beneficio Primera Hectárea de Riego (773 hectáreas). Además se financiaron 2.056 proyectos de riego intrapredial, 14 proyectos de recuperación de tranques de la ex CORA, 100 proyectos de Riego Asociativo; y 1.183 usuarios accedieron al Bono Legal de Aguas y 94 a Estudios.

Las emergencias provocadas por la crisis hídrica, junto con las lluvias extra temporáneas, incendios forestales, nevazones, sismos y otros eventos climatológicos, obligaron ir en ayuda de 60.600 pequeños agricultores en 14 regiones en los que se invirtieron $9.900 millones. De estos, $7.600 millones se destinaron a afectados por la sequía con alimento para su ganado, fructosa para abejas, botiquines veterinarios, materiales de riego, entre otros.