Funcionarios del Congreso denuncian irregularidades en el Senado

Funcionarios “silenciados” del Congreso denuncian y advierten al nuevo secretario general, Raúl Guzmán, de irregularidades al interior del Senado.

La carta anónima ha sido difundida en los correos electrónicos de cientos de funcionarios, y ya fue vista por varios parlamentarios.

Según aseguran en el documento, abría una resistencia de los representantes de las asociaciones de la cámara alta a la llegada de Guzmán, y la razón sería por “el interés que tienen de mantener los millonarios sueldos que por años han recibido”.

“Al interior del Senado existen verdades cofradías conformadas por funcionarios con altos cargos y en su mayoría de planta, que buscan impedir, a como dé lugar, el ascenso de otros”, declaran.

Incluso, revelaron que los abogados tenían un comedor distinto al de los funcionarios de menor jerarquía.

Las denuncias de los funcionarios

Asimismo, aseveran que dentro regalías que estos representantes de la cámara alta se han dado, está el “desplazamiento entre Valparaíso y Santiago en taxis pagados por la corporación”.

En el caso de los que tienen auto propio, les reembolsan la bencina y peajes, mientras que la mayoría de funcionarios tienen que viajar en buses interurbanos.

Por otra parte, aseguran que “algunos abogados secretarios de comisión no tienen título profesional”, el que es requisito para ocupar el puesto.

Mientras que “otros cuentan con la ‘asignación de profesional’ sin tener ni cuarto medio”, que también es requisito para ingresar al Senado.

Según ellos, algunos funcionarios tienen más de un cargo y reciben más de un sueldo. Así como también este “grupo de poder” puede usar su credencial para marcar el ingreso y salida, y no la huella digital como todos.

Incluso, descubrieron que el presidente de una de las asociaciones, “vendió un terreno propio a la asociación que él mismo representa”.

Debido a todas estas razones, acusan que hay una “vulneración a la garantía constitucional de ‘igualdad ante la ley'”. Y esperan con la llegada de Raúl Guzmán, “sean los méritos los que cuenten y no el amiguismo”.