Carmen Frei: “Mi padre fue asesinado por la dictadura”
La ex senadora Carmen Frei se refirió a la sentencia del ministro Alejandro Madrid que estableció como magnicidio la muerte del ex presidente Eduardo Frei Montalva y declaró culpables a seis encausados.
Desde la sede de la Democracia Cristiana, una de las impulsoras de la investigación por este caso, emitió una declaración en la que sostuvo que la responsabilidad en la muerte de su padre fue de la dictadura.
“La sentencia que hoy el ministro Alejandro Madrid ha dado a conocer al país deja establecido que mi padre fue asesinado por la dictadura cívico militar que encabezó Augusto Pinochet”, planteó Frei.
“Se trata del único caso de magnicidio en la historia de Chile y creo que es un hecho tan grave y el país debe asumirlo como parte de uno de los períodos más oscuros de nuestro pasado. En él se impuso una manera de pensar y de actuar inmoral y aberrante que hizo habitual el asesinato, la desaparición de personas, la tortura y el exilio”, recalcó la ex parlamentaria.
Aunque la versión oficial del deceso del ex Mandatario que entregó la Clínica Santa María en 1982 lo atribuyó a un choque séptico tras una serie de complicaciones post operatorias, Carmen Frei recopiló datos junto a médicos y abogados sobre el caso.
Y ella misma fue la primera en encender la luz de alerta sobre el magnicidio, cuando en un discurso en el Senado en el año 2000 dijo lo que pasó y que la familia se querellaría.
“Lo que acreditó la investigación de 811 páginas, y de lo cual da cuenta el ministro, es que nada de lo que ocurrió en torno al asesinato de mi padre fue accidental o fruto del azar, el régimen decidió que había que eliminarlo por tratarse de una figura -para ellos- extremadamente peligrosa y se puso en marcha una trama premeditada en las que actuaron muchos y cumplían propósitos bien definidos”, manifestó en su declaración la ex parlamentaria.
Además sostuvo que “la red encargada de su seguimiento supo que se iba a operar en la clínica Santa María y médicos y equipos de salud vinculados a los servicios represivos de la dictadura dispusieron de todas las facilidades para desplegarse en el recinto, lo coparon y se hicieron cargo de tratar el cuerpo enfermo de mi padre, lo intervinieron y le provocaron la muerte y lo que es más terrible, luego, de una manera inhumana, dejaron sus restos con la complicidad de médicos del Hospital Clínico de la UC”.
Pero pese a las dificultades, Frei aseveró que por fin se impuso la justicia en esta causa por el asesinato de su padre.
“Cuando en el año 2000 decidí hablar en el Congreso para hacer públicos los antecedentes en los cuales fundábamos nuestras dudas razonables sobre la muerte de mi padre, sabíamos que se iniciaba un camino que no sería nada de fácil. A pesar de muchas incomprensiones, rechazos, y el férreo pacto de silencio del Ejército, gracias a la acción de la justicia, la verdad se ha impuesto”, resaltó.