Contraloría: Instituciones públicas no pueden bloquear usuarios en Twitter
La Contraloría General de la República dictaminó que las instituciones públicas no pueden bloquear usuarios en sus cuentas de Twitter oficiales.
La institución se pronunció sobre la materia tras un requerimiento de Manuel Lobos González y David Zúñiga Vera, quienes fueron bloqueados por el perfil de la Policía de Investigaciones.
La PDI se defendió argumentando que contaban poseen “un manual de uso de redes sociales, reservándose el derecho a bloquear las cuentas de usuarios que transgredan ciertas normasbásicas como uso de lenguaje violento, soez, ataques a instituciones, autoridades y a cualquier tipo de minorías, entre otros tópicos”.
La policía civil, además, sostuvo que “es facultad exclusiva y excluyente de todo administrador de una cuenta de ese tipo la de aceptar y/o bloquear discrecionalmente a sus seguidores y/o comentarios efectuados, sin constituir una conducta arbitraria o ilegal, sino una manifestación de su derecho sobre la misma”.
Sin embargo, la Contraloría recurrió a la Constitución para desarmar la postura de la institución: “De acuerdo con el artículo 5° de la Constitución Política, es deber de los órganos del Estado respetar y promover los derechos esenciales que emanan de la naturaleza humana, garantizados por la misma. Enseguida, el inciso segundo del artículo 8° prevé que son públicos los actos y resoluciones de los órganos del Estado, así como sus fundamentos y los procedimientos que utilicen”.
La Contraloría explicó que su criterio es considerar las cuentas de Twitter de los organismos públicos como “un bien de dicho servicio, que debe ser utilizado para servir a los fines institucionales o para publicitar comunicaciones o hechos de interés general para toda la población acerca de algún aspecto relevante de las labores, actividades o tareas que versen acerca de su funcionamiento (…) en correspondencia con el derecho de los ciudadanos a conocer y ser informados de las actividades y labores desarrolladas en forma continua y permanente por los servicios públicos, y a emitir opiniones sobre ello”.
“Consecuente con lo expuesto, no corresponde que la PDI bloquee unilateralmente en su cuenta institucional a aquellos usuarios particulares de la citada plataforma virtual de comunicación social que han emitido ciertas opiniones o expresiones, debiendo adoptarse, a la brevedad, las acciones necesarias para subsanar dicha situación”.