Dávalos: “es el momento de salir a matar los mitos”
El primer capítulo de la nueva temporada del programa de análisis político “Estado Nacional”, el exdirector del área sociocultural de la Presidencia, aseguró que el caso fue “una invención orquestada de un sector de la prensa”, en referencia al artículo “Un negocio Caval” de la Revista Qué Pasa.
“Cuando tú montas algo como lo que hicieron, basado en un artículo periodístico que no señala nada -hay un negocio nada más- lo que buscas es desestabilizar un gobierno, no es otra cosa. (…) No sé si la operación es de Qué Pasa, pero estoy seguro que es una operación política. No tengo una segunda lectura a esto”, indicó el hijo de la expresidenta Michelle Bachelet.
En opinión de Dávalos, cuando se quiere hacer eso “se busca una persona cercana a la Presidenta de la República como instigador, como la persona que está detrás de algo corrupto, oscuro, sucio; y al final del día lo que dice la investigación es que no hay absolutamente nada”, enfatizó.
Requerido de por qué optó por hablar ahora de la situación que también involucra a su esposa, Natalia Compagnon, respondió que le daba confianza el TVN en tanto canal público y el programa por el prestigio que ya tiene en la audiencia y que ya era hora de derribar mitos en torno a él y su familia.
“Creo que era el momento de salir a matar varios mitos, el Caso Caval en sí es un mito (…) y además de todo eso creo que era necesario, de una u otra forma, dar mi versión”.
RENUNCIA AL GOBIERNO Y RELACIÓN CON PEÑAILILLO
Sebastián Dávalos fue consultado por la supuesta mala relación que tuvo con el exministro del Interior Rodrigo Peñailillo y sobre cómo se produjo su dimisión al cargo que tenía –según ha insistido- ad honorem- en La Moneda.
Indicó que tras darse a conocer el caso, renunció a su cargo de director del área sociocultural en el Gobierno por responsabilidad política y que no se vio expuesto a presiones. “Yo fui la persona que dije voy a renunciar por una cuestión de responsabilidad política”, sostuvo.
Referente a un supuesto enfrentamiento a golpes con Peñailillo, Dávalos aseguró que eso era falso y que “sí fue efectivo que Rodrigo Peñailillo llegó un día miércoles del sur y no se reunió conmigo hasta el viernes, no sé si por problemas de agenda. Tengo mi propia opinión sobre eso”.
Añadió que “él quería además que yo fuera a su casa, porque vivía muy cerca; y yo le dije que no porque no me iba a exponer a ningún problema con la prensa. Él fue y yo le mostré mi renuncia y él quería que yo renunciara en la puerta de mi casa. Yo le dije que no, que iba a renunciar donde corresponde, voy a renunciar en Palacio”, aseveró.
Respecto a la gestión del exsecretario de Estado, al que se le denominó en su minuto delfín de Bachelet, el hijo de la exgobernante afirmó que no tiene problemas con él, pero que cree que se equivocó en la administración interna del ministerio, así como en el manejo comunicacional puntualmente del Caso Caval.
“Yo creo que él – es una opinión personal- vio las encuestas y pensó que iba a ser presidente de Chile y cuando alguien se obsesiona con algo como ser presidente, es capaz de hacer cualquier cosa”, afirmó.
EL COSTO DE SER HIJO DE BACHELET
Sebastián Dávalos indicó a Estado Nacional que toda la vida “ha sido un costo” ser el hijo de una exmandataria como su mamá.
Respecto a su vida actual, sostuvo que actualmente no puede hacer su vida normal debido a que no puede salir a la calle, tampoco puede postular a trabajos relacionados con el Estado y que la empresa privada se cuida de contratarlo para evitar suspicacias en caso de que ésta tenga contratos con el Estado.
Por ello, dice que vive de ahorros que le quedan de inversiones hechas antes del estallido de Caval y de “uno que otro proyecto” que de repente le sale, además de la ayuda de sus amigos en el extranjero que le ofrecen algunos trabajos.
También se hizo una autocrítica en cuanto a que “debí salir a hablar mucho antes, fui ingenuo”
Referente a una eventual nueva candidatura de Michelle Bachelet, sostuvo que era factible ante la carencia de liderazgos en la ex Nueva Mayoría. “No me gustaría y, bueno, ante la falta de liderazgos que hay en la oposición se recurre a liderazgos anteriores, factible es pero espero que no lo sea”, dijo, poniendo de ejemplo al expresidente Eduardo Frei cuando tuvo que ser candidato.
También se mostró crítico de la forma en que se ha desempeñado la oposición al gobierno del Presidente Sebastián Piñera y afirmó que no se identifica con los nuevos referentes de izquierda agrupados en el Frente Amplio, ya que “no se ve política de consenso en ellos y no discutir para llegar a consensos”.
Argumentó que la razón es “la desconexión de los partidos con el ciudadano común y corriente, no creo que exista interpretación de lo que la gente quiere como tal por parte de los partidos y mientras siga esa desconexión, la oposición no tiene nada que ofrecer a sus votantes” y en ese sentido dijo que no ve liderazgos fuertes, aunque dice que algunos como José Miguel Insulza se pueden potenciar o Heraldo Muñoz.