Las fallas de La Moneda en la gestión de la crisis sanitaria por el coronavirus

Efectivamente a la actual administración de Sebastián Piñera le ha tocado sortear uno de los períodos más complejos para el país en décadas. Pero más allá de la mala suerte y sin contar los varios problemas políticos y económicos que ya acarreaba antes del 18 de octubre, en los últimos seis meses La Moneda ha enfrentado dos episodios –una revuelta social y ahora la pandemia del coronavirus–, que han dejado en evidencia la poca capacidad del actual Gobierno para reaccionar bien ante los eventos inesperados y de grandes magnitudes. Una debilidad que ha quedado aún más en evidencia gracias al acertado manejo de alcaldes y alcaldesas, que en ambas circunstancias han estado en todo momento varios pasos adelante, marcando la ruta de las decisiones en Palacio.

En pleno estallido social, mientras en el Gobierno y en el Congreso parecían dar manotazos de ahogados, la Asociación Chilena de Municipalidades –integrada por alcaldes de oposición y del oficialismo– instaló la idea de realizar una consulta comunal para preguntar si la gente quería o no una nueva Constitución. Una iniciativa que presionó a La Moneda y a Chile Vamos a abrirse a la necesidad de un proceso constituyente mediante un plebiscito, lo que al final quedó materializado en el acuerdo “Por la Paz y la Nueva Constitución” firmado por la mayoría de los  partidos políticos el 15 de noviembre de 2019.

Ante la crisis por el COVID-19, la presión de los alcaldes regresó a La Moneda el fin de semana. Luego que el Presidente Piñera confirmara que el país se encontraba en la fase 3 y que no se podía rastrear el origen de todos los contagiados con coronavirus, varios alcaldes oficialistas comenzaron a anunciar que suspenderían las clases en las escuelas públicas y subvencionadas, mientras en paralelo el ministro de Salud, Jaime Mañalich, cuestionó la medida de los jefes comunales a través de sus redes sociales, y a nivel interno remarcaba que las “clases se mantendrían sí o sí el lunes”, según consignaron desde Palacio.

La politóloga y académica de la Universidad de Valparaíso, Javiera Arce, destacó que estamos frente a “un Gobierno con un 6% de aprobación”, que tiene “una autoridad deslegitimada, al punto que cuando entrega recomendaciones la gente las cuestiona. Además de las fake news, los antivacunas, hay que batallar con la falta de autoridad”. Agregó que desde la administración piñerista se ha presentado un “show” y que la “forma de abordar la crisis se demuestra en la incompetencia de Jaime Mañalich, cuando el ministro entra a La Moneda regalando alcohol gel y al mismo tiempo permite la especulación de precios y la codificación del test”.

Chile Vamos se trenzó en una pugna interna entre alcaldes oficialistas y personeros de Palacio, mientras el comité de expertos reiteró y explicó a toda la prensa la decisión de mantener a los estudiantes en clases, lo que fue reafirmado en las redes oficiales del Minsal. Pero media hora después y tras una compleja reunión entre los alcaldes y parte del gabinete ministerial, el panorama cambió, ya que salió el propio Mandatario a afirmar que, debido al aumento en los afectados –que en ese momento llegaban a 75– se suspenderían las clases en colegios públicos y particulares subvencionados. La cosa no terminó ahí, ya que el alcalde de Puente Alto, Germán Codina (RN), corrigió al Presidente y explicó que lo acordado con el Mineduc era que la medida aplicaba a todos los establecimientos educacionales, lo que más tarde fue confirmado por el ministro de Educación, Raúl Figueroa.

En menos de una hora el Gobierno cambió la versión sobre su fórmula para abordar la crisis por el Coronavirus y si bien en el oficialismo reconocieron que “esto puede pasar en momentos tensos y complejos”, no cayó nada bien la desprolijidad de las escenas públicas de este domingo, porque develaron que el “manejo de esta crisis ha sido un desastre” y que la actual administración podría salir “aún más golpeada que tras el estallido social”.

En el círculo piñerista observaron que el Primer Mandatario hasta ahora no ha “logrado dar el ancho” y que la estrategia de seguir la línea de liderazgo del presidente de Francia, Emmanuel Macron, “ha sido un fracaso”. En el Gobierno explicaron que Piñera ha procurado estar en cada anuncio importante, lo que ha traído “conflictos” y, sumado esto a la dupla que ha hecho con el ministro Mañalich, ha provocado que haya “cuestionamientos internos” a la estrategia establecida. Es más, algunos destacaron que la ministra vocera, Karla Rubilar, ha tenido que salir a “arreglar más de un desastre”.

Uno de los principales problemas del Gobierno al enfrentar la pandemia del COVID-19 sería su falta de legitimidad tras el estallido social. Tras una reunión con todos los partidos políticos, la presidenta del Colegio Médico, Izkia Siches, señaló que la situación de Chile no es la misma que en otros países, ya que el movimiento social puede tomar estas medidas como una forma de control más que de combate al coronavirus: “Necesitamos convencer a la ciudadanía (…), este Colegio Médico se va a jugar todo su capital político para hacer frente a esto, pero requiere trabajo en unidad, que no sea parte de la agenda política de cada sector”.

En la última encuesta Activa, realizada hasta el 14 de marzo de 2020, el 57,4% señaló que el Gobierno ha entregado información “no muy clara” sobre el coronavirus, un 34% calificó como “regular” su desempeño para enfrentar la pandemia, mientras que un 28,1% lo definió como “bueno” o “muy bueno” y el 37,7% lo consideró “malo” o “muy malo”.

La politóloga y académica de la Universidad de Valparaíso, Javiera Arce, destacó que estamos frente a “un Gobierno con un 6% de aprobación”, que tiene “una autoridad deslegitimada, al punto que cuando entrega recomendaciones la gente las cuestiona. Además de las fake news, los antivacunas, hay que batallar con la falta de autoridad”. Agregó que desde la administración piñerista se ha presentado un “show” y que la “forma de abordar la crisis se demuestra en la incompetencia de Jaime Mañalich, cuando el ministro entra a La Moneda regalando alcohol gel y al mismo tiempo permite la especulación de precios y la codificación del test”.

Errores y más errores

Desde que se detectó el primer caso de COVID-19 en Chile, se ha cometido una serie de errores, varios comunicacionales. En el Gobierno reconocieron que los días más complejos se desarrollaron durante este fin de semana, no solo por el impasse con los alcaldes, sino también porque “quedaron al descubierto falencias de control”.

Hasta el momento la claridad era que, a partir del 10 de marzo, todos quienes ingresaban al país provenientes de países críticos, como Italia y España, debían firmar una declaración jurada señalando que no tenían síntomas de coronavirus y debían quedarse en cuarentena. Todo bien, hasta que el día viernes comenzaron a salir denuncias de personas que dieron positivo en el examen y que no habían sido contactados por el Minsal, las que se incrementaron durante el fin de semana.

Ayer se denunció un caso en el matinal de CHV. Una joven había sido diagnosticada el viernes en la mañana por la Clínica Santa María, recién tres días después había sido contactada por el Minsal y no estaba registrada en los 75 casos oficiales que había confirmado Mañalich el domingo. Minutos después, el Presidente anunció que se había pasado a la fase 4, que se contabilizaban 155 casos de Coronavirus en Chile, cifra que en la misma conferencia de prensa subió a 156.

También durante el fin de semana, las miradas se trasladaron hasta Caleta Tortel, la primera comuna en ser declarada en cuarentena, luego que se confirmó que un pasajero británico contagiado con el virus, diagnosticado en Coyhaique, desembarcó en el lugar, se paseó y tuvo contacto con varias personas del sector durante horas. El alcalde, Bernardo López, cuestionó la falta de respuesta de las autoridades de Gobierno y tras citar a una reunión del comité de emergencia comunal, decidió establecer la cuarentena por 14 días, por lo tanto, “no pueden salir ni entrar personas a Caleta Tortel”.

Al interior del propio Gobierno existe preocupación, no solo por los errores de gestión que han sido públicos y evidentes, sino porque actualmente hay al menos ocho funcionarios en cuarentena preventiva y uno diagnosticado con Coronavirus. Según informó Meganoticias, seis de sus funcionarios de la Segegob estarían en cuarentena preventiva debido a que uno de ellos habría tenido contacto con una persona contagiada, aunque ninguno habría tenido contacto con la ministra Rubilar.

Además, El Mostrador confirmó que hay un funcionario del Senda contagiado, parte del equipo “Elige Vivir sin Drogas” y que dio positivo “sin presentar síntoma alguno”. El asesor se encontraba en cuarentena desde el día 10 de marzo junto a otros profesionales de dicho organismo con los que había retornado de “un viaje a Europa realizado por motivos laborales”, según informó el organismo a sus trabajadores mediante un comunicado.

Lo que no informó el Senda es que uno de los funcionarios en cuarentena sería el director del organismo, Carlos Charme, que las personas que asistieron a ese viaje fueron a las oficinas a trabajar antes del 10 de marzo y tuvieron reuniones previo a entrar en cuarentena, ya que aún no se aplicaban aquí las medidas preventivas a los viajeros. Los funcionarios llevaban 5 días en cuarentena cuando recién fue informada oficialmente la planta de funcionarios y funcionarias, lo que es visto como una “negligencia” al interior del Ministerio del Interior, del cual depende este servicio.

Delantera municipal

Piñera ayer anunció el cierre de las fronteras a partir del miércoles 18 de marzo, aunque se permitirá la salida de extranjeros y el ingreso de chilenos al territorio, los que deberán pasar a cuarentena, una medida que fue tomada hace días por países vecinos como Argentina. Al ser consultado respecto a la demora, el ministro Mañalich explicó que la circulación de extranjeros en el país “ya es baja” debido a la pandemia.

Una de las principales críticas que ha surgido contra el Gobierno es la falta de medidas ante el alza de los precios y acaparamiento de remedios y artículos de primera necesidad, en donde los precios de un paquete de mascarillas, alcohol gel y desinfectantes han llegado hasta los 100 mil pesos en mercados digitales. Mañalich dijo que con la Ley de Cenabast se podía intervenir en los aumentos de precio, aunque la medida aún estaría en estudio.

Entre las principales medidas de prevención anunciadas por el Gobierno, está adelantar la campaña de vacunación de la población de riesgo contra la influenza. Cabe destacar que el COVID-19 no tiene una vacuna, pero su combinación con otras afecciones pulmonares puede agravar la enfermedad. Es por esta razón que se puso como límite tener a la totalidad de personas de la tercera edad, niños y niñas y embarazadas vacunadas en seis semanas.

El resultado de esa medida fue que los centros de salud públicos ayer se encontraban saturados, por lo que algunos alcaldes, como Germán Codina (Puente Alto) y Jorge Sharp (Valparaíso), anunciaron que dispondrán de escuelas y módulos extras como vacunatorios para la población de riesgo. En comunas como Providencia y Las Condes, Joaquín Lavín y Evelyn Matthei anunciaron la vacunación en el hogar de las personas con problemas de movilidad.

Otros alcaldes han ido más allá. Ayer en la tarde el alcalde de La Florida, Rodolfo Carter –quien en La Moneda es visto como “el principal detractor del Gobierno”– expresó por sus redes sociales que “no podemos cometer los errores de Europa o el costo lo pagaremos en vidas. En La Florida declararemos emergencia comunal. En las próximas horas se suspenderán todo tipo de actividades comerciales que impliquen presencia de público. #covid19chile fase4”.

En tanto, el Colegio Médico, junto a exministros de la cartera de Salud y autoridades relativas al área, propusieron al Gobierno convocar –vía decreto presidencial– a un Consejo Nacional de respuesta integral al SARS- CoV-2 y a la pandemia COVID-19 para “más tardar” este martes 17 de marzo. “Esperamos que el Presidente sea bastante activo”, planteó la presidenta de la entidad gremial.

“Le hemos pedido al Presidente ser enfático a la hora de implementar medidas, esto requiere cambiar el switch de cómo funciona Chile, le hemos pedido avanzar en la fijación de precios y les hemos pedido a los partidos que respalden al Gobierno en esas iniciativas. Aunque las políticas tomadas por el Gobierno van en la línea correcta, hemos sido reiterativos a la hora de pedir que se aceleren las medidas”, sentenció Siches.